BANCA DOS PROBLEMAS
PLAN B: BANCA DOS PROBLEMAS
Con el objetivo de ofrecer un servicio de artista,
dando la ocasión a las personas para triturar sus propios problemas, busqué en
el campus de la Universidad Nacional de Colombia (porque en aquel momento habían
restricciones de seguridad frente a la calle), un espacio específico donde yo
pudiera proponer un punto fijo a la acción. Encontré la entrada de la
universidad que está junto a la calle 45 un lugar ideal a tal objetivo,
teniendo en cuenta que ahí se ubican unas cuantas chazas de servicios diversos
prestados por alumnos a los alumnos, como vendedores de postres, caramelos,
DVDs, cuadernos, mochilas, minutos de celular. La estrategia seria, pues,
ponerse junto a estos y ofrecer a los pasantes el servicio de dar fin a sus
problemas, gratis. Así, instalé una
pequeña chaza compuesta de mesa, un trípode con carteles de invitación y,
claro, con el triturador de papeles.
Había en mi la duda y expectativa si la gente iría acercarse por si propio,
resultando en una gran satisfacción en ver que sí, eso pasara. La gente se
acercaba por una curiosidad chistosa frente a la invitación de los carteles,
que decían: - ¿Problemas? Tritúralos aquí y ahora, gratis- pronto escribiendo
sus problemas en los papeles ofrecidos, muchos me contando de que se trataba su
problema y la mayoría con una cierta fe y esperanza que pudiesen, pos
triturados, pasárselos. El hecho simbólico de dar fin a los afrontes que la
vida nos presenta, era un mote muy presente en cada partícipe, llenando la
acción de emoción, sentimiento, reflexión paralelos a una situación inusitada, de
extrañamiento, pero conmovedora y
atractiva en su impulso divertido. Las acciones en la calle, exigen una
investigación muy apurada de las situ-acciones
que en esta se desarrollan. La estrategia de ponerse con una chaza, como un servicio de artista, gratis, funciona
cuando bien pensada la ubicación y tiempo de esta, llevándose en cuenta el
contexto en que pretende funcionar. En la calle, pocas son las cosas pasibles
de predeterminación, necesitando una abertura de la acción y del artista al
devenir del cotidiano (sea con relación a la exposición frente a las personas,
al tráfico del lugar, al contacto, a la intemperie, entre otros). Ponerse en
una chaza, junto a otras chazas, en un lugar de pasaje, donde los alumnos ya están acostumbrados a
caminar un poco más despacio, echar un vistazo a lo que está siendo ofrecido,
se me presentó como un éxito en el trabajo. Igualmente, me interesó,
especialmente, el hecho de que, a través de esta estrategia, las gente se
acercaba por gusto e interés propio (sin que yo las buscara), ocurriendo
también una frecuencia variada de tipos, estilos, edades y funciones.